Los sindicatos policiales ErNE y Esan coinciden en que el Departamento de Seguridad debe poner más medios y herramientas si quiere reducir el número de delitos que se están registrando en Euskadi. Las dos centrales comparten también la percepción de que la inseguridad en la calle va a más. «Es algo que cualquier ciudadano ve», afirman. Por eso insisten en la necesidad de que haya más agentes en la vía pública y con mejores herramientas para poder reducir la delincuencia.
Que en el País Vasco se ha registrado una «escalada de peleas y exhibición de armas blancas» es un hecho, según ErNE. Y el sindicato sostiene que el Gobierno vasco «no está tomando las medidas necesarias para afrontar el cambio en el tipo de delincuencia que se está produciendo en las calles de Euskadi y está abocando a la ciudadanía a afrontar mayores riesgos». En ese sentido plantea la necesidad de formación para que los agentes se «reciclen» a la hora de enfrentarse a delincuentes que porten cuchillos y navajas y que doten a los policías de pistolas eléctricas taser.
Para Esan es «evidente» que la reforma de la ley de seguridad ciudadana no ha sido efectiva y lamenta que no se atendiesen las propuestas que la central planteó hace un año a esta norma. «Un año después asistimos a fuertes incrementos de los niveles de delincuencia en nuestra sociedad», sostiene.
Tanto ErNE como Esan insisten en que el número de agentes es insuficiente y esto se nota en unidades como las de investigación. El resultado, afirman, es que se está perdiendo capacidad para prevenir los delitos «y llegamos cuando los hechos ya se han consumado».