Este otoño se prevé más que 'caliente' para el Gobierno vasco a raíz de las movilizaciones de los trabajadores públicos. Este mismo jueves los principales sindicatos de la Ertzaintza se manifestarán frente al Parlamento vasco para reclamar que el Ejecutivo de Iñigo Urkulluaumente tanto la plantilla como los medios técnicos para los agentes. Será la primera protesta de muchas otras que se avecinan. 

En el actual contexto de crisis energética e inflación desbocada, las movilizaciones se antojaban más que probables. Y ya están aquí. Al Ejecutivo del PNV y el PSE se les están abriendo diveros frentes en materia laboral. Los problemas eran previos, pero en los últimos días la tensión se ha elevado sobremanera por la posibilidad de que el Gobierno vasco aplique a sus trabajadores la misma subida salarial que el Gobierno central.

Ya hace unos días, incluso antes de que estallase la citada polémica sobre los salarios, los sindicatos ErNE y Euspel, los más representativos del cuerpo policial, anunciaban que reanudarían las movilizaciones para denunciar "el aumento galopante de la inseguridad pública" en Euskadi, y la "falta de plantilla" en la Policía autonómica, unida al incremento "exponencial" del trabajo y la carencia de material. Lo harán este mismo jueves frente a la Cámara de Vitoria, donde se celebrará a esas horas el pleno ordinario. 

"Inseguridad galopante"

Acaso el principal destinatario de esta protesta sea el propio lehendakari, al que estos sindicatos de la policía autonómica señalan porque en el reciente Debate de Política General, celebrado apenas hace dos semanas, no admitió que ha aumentado la "seguridad ciudadana". Un aumento que al decir de estos sindicatos resulta "galopante". 

Tal y como recogió Europa Press, desde ErNE y Euspel denuncian que tanto el citado silencio de Urkullu sobre "una inseguridad percibida por la ciudadanía" como "la desidia del Departamento de Seguridad respecto a la Ertzaintza". Eso último se traduce, según ellos, en "una falta de plantilla que ya es estructural y que supone un aumento exponencial de las cargas de trabajo de los ertzainas".