La Unidad de Acción Sindical de la Ertzaintza, formada por los sindicatos ErNE, Esan y SIPE, mostró ayer su confianza en que se inicie «un proceso real de negociación» pese a que, según criticaron, el equipo que dirige el consejero de Seguridad, Josu Erkoreka, «desoye de manera sistemática» sus demandas.
Los sindicatos continuaron su ronda de reuniones con los partidos políticos con un encuentro con el presidente del EBB del PNV, Andoni Ortuzar, en Sabin Etxea, para trasladarle los «graves problemas que arrastra la Ertzaintza». En un comunicado conjunto tras el cara a cara –en el que también estuvo Joseba Aurrekoetxea–, las centrales señalaron que habían trasladado a la formación jeltzale «la falta de diálogo y de entendimiento que existe en la actualidad». En ese sentido, lamentaron haberse enterado a través de los medios de comunicación de «posibles convocatorias de la mesa de negociación y de los aspectos que en ella se van a tratar».
«Hemos podido desgranar todo aquello que en estos momentos se demanda desde la parte sindical. No solo sobre mejoras salariales, sino en todas aquellas medidas que entendemos se deberían abordar de manera inminente ante los graves problemas estructurales y de materiales que viene adoleciendo esta institución desde hace ya demasiado tiempo», añaden los sindicatos.
Asimismo, criticaron que «el equipo actual» que dirige el consejero Erkoreka «desoye de manera sistemática» sus demandas y confiaron en que lo acontecido en la reunión «sirva para iniciar un proceso real de negociación a la que esta parte ha estado siempre dispuesta». Las centrales reclamaron al PNV que traslade al equipo de Gobierno vasco la necesidad de «una mirada amplia» y «talante negociador».
Poner «parches»
La ronda que viene manteniendo los sindicatos con las diferentes formaciones –han estado también con Eneko Andueza y Carlos Iturgaiz– se debe a que ven que «el tema está más que enquistado» y que solo los grupos políticos pueden ser capaces de «desbloquear» esa situación.
A su entender, el Departamento de Seguridad del Ejecutivo autónomo «tiene que dar una vuelta absolutamente a todo y tiene que haber una intención clara de negociar», porque hasta ahora han tomado medidas que sólo sirven, en su opinión, «para parchear, algo que no va a subsanar el problema».