Los sindicatos Erne, Esan y Sipe han solicitado el cese del director de Gestión Económica y Recursos Generales del Departamento de Seguridad del Gobierno vasco, José Gómez. Le acusan de haber utilizado el coche oficial el pasado domingo 7 de enero, en plenas fiestas navideñas.
Las centrales han solicitado su cese al vicelehendakari y consejero de Seguridad, Josu Erkoreka. Lo han hecho ya que –insisten– el director ha contravenido la normativa interna que regula la utilización de este tipo de automóviles, que pueden ser usados por los altos cargos y los funcionarios para el desempeño de sus funciones laborales, pero n o en el tiempo de ocio. Acompañan su denuncia con una fotografía del coche oficial, un BMW X1 XDrive 25e, tomada ese mismo domingo en una localidad vasca.
Un supuesto incumplimiento que, además, añaden las centrales, se ha producido en un momento en el que el parque móvil de la Ertzaintza «agoniza» y en el que, sostienen los representantes de los trabajadores, muchos agentes están «sin vestuario» en diversos destinos. Problemas que han llevando al colectivo a una situación «insostenible» y que son, según la «unidad sindical», responsabilidad en gran medida del director de Gestión Económica.
Sobre el papel, los empleados públicos pueden disponer de los vehículos «durante un tiempo limitado a la duración del desplazamiento requerido para su labor». En cambio, los directores y los viceconsejeros tienen «asignados» coches de forma individual. Los utilizan, por ejemplo, para ir y volver del trabajo o para acudir a reuniones, entre otros supuestos. Lo que no pueden, según la normativa, es utilizarlos con fines personales.
Denuncia de Erne, Esan y Sipe
Consultadas por este periódico, fuentes cercanas al director de Gestión Económica reconocieron que Gómez utilizó el coche el domingo. Pero insistieron en que sólo lo movió de un sitio a otro del municipio durante un breve periodo de tiempo y debido a un problema de aparcamiento.
Según explican estas mismas fuentes, el alto cargo reside en una zona en la que «no hay parcelas de garaje». Por lo que «habitualmente deja el coche de trabajo en la calle». Lo que ocurrió ese fin de semana –según su versión– es que, «con motivo de la cabalgata de reyes», se produjeron «restricciones de aparcamiento» en el municipio y el director «dejó el coche en una parcela prestada por unos amigos». Lo único que hizo el domingo fue coger el coche –insisten los mismos medios– para moverlo «desde la parcela que le prestaron hasta un aparcamiento exterior», siempre dentro del municipio. Lo hizo para poder usarlo al día siguiente para acudir «a su puesto de trabajo».
Esta petición de cese se produce en un momento de abierto enfrentamiento entre los sindicatos y la dirección de Gestión Económica. Erne, Esan y Sipe acusan a sus responsables de poner infinidad de trabas para, por ejemplo, dotar a las unidades de tráfico y de seguridad ciudadana de «vestuario adecuado». Obstáculos que –insisten– son puestos por una persona que utiliza los «recursos públicos de manera particular» e «irregular».