Bingen Zupiria prefiere que le repitan una pregunta o admitir abiertamente que no tiene una respuesta antes que lanzar una especulación sobre algo que desconoce, o desatar un incendio con unas declaraciones poco afortunadas. El exportavoz del Gobierno vasco de coalición PNV-PSE tuvo además la ocasión de ensayar esa cualidad en las ruedas de prensa posteriores al Consejo semanal, donde le tocó lidiar con las preguntas sobre la Ley de Educación o las diferencias entre los socios en materia de vivienda, cuestiones que resolvía echando mano al pacto de gobierno, palabra por palabra. Ese perfil es el que ha primado el lehendakari Imanol Pradales para que se haga cargo de otra cuestión peliaguda, el departamento de Seguridad.
Y Zupiria admitió este martes en su toma de posesión del cargo que la administración ha tenido dificultades para desatar algunos nudos y él se compromete a buscar acuerdos “razonables y sostenibles en el tiempo”. Quizás por este perfil poco proclive a las polémicas, sorprendieron más si cabe las pintadas que aparecieron este mismo martes en un invernadero de Hernani, su localidad natal, donde se arremete contra los ertzainas (“zipaios”) y contra el consejero, a los que intimidan con un “tiro en la nuca”.
Nada más ser nombrado como consejero, Zupiria ha sido recibido con unas pintadas que chocan más aún en el año 2024, con ETA ya disuelta. Desde Gipuzkoa, el jeltzale Imanol Lasa concedió toda la gravedad al asunto asegurando que no son meros tics del pasado, sino “la expresión del odio y la amenaza que aún perviven”, y pidió a Bildu y Sortu, la fuerza mayoritaria dentro de la coalición y representante de la izquierda abertzale oficial, que lo condenaran. El alcalde del municipio, Xabier Lertxundi, precisamente de EH Bildu, dio la orden de borrar esos grafitis, mostró su respaldo a los aludidos e impulsó una declaración institucional que dice que este tipo de actuaciones resultan “inaceptables y no tienen cabida”. El sindicato mayoritario en el Cuerpo, ErNE, condenó “enérgicamente” las pintadas y pIdió llevar a los responsables ante la justicia.
"Servir a la ciudadanía"
En el acto de toma de posesión en Ajuria Enea, Zupiria recordó a sus predecesores y se remontó a los orígenes de la Ertzaintza para presentarla como uno de los elementos más singulares del autogobierno. Además, aseguró que la Policía “debe tener siempre un comportamiento profesional”, y a los mandos políticos les corresponde “respaldar su actividad ordinaria y ser exigentes con su trabajo y comportamiento, teniendo claro que su objetivo es servir a la ciudadanía”. Abogó también por perseguir el delito, para que Euskadi siga siendo un país seguro para la ciudadanía vasca y los visitantes.
Cuando se disponía a terminar, añadió que, como sucede en otros puntos de la administración pública, no se han desatado algunos nudos en materia de relaciones laborales. Por ello, se comprometió a impulsar el diálogo para lograr acuerdos. “En distintos ámbitos públicos estamos teniendo dificultades para desatascar y soltar algunos de los nudos. Me comprometo a impulsar el diálogo y la búsqueda de acuerdos para alcanzar acuerdos razonables y sostenibles en el tiempo”, concluyó.