Cerca de dos centenares de policías municipales se manifestaron ayer por las calles de Bilbao en protesta por los recortes en sus vacaciones y libranzas que, según denuncian, quiere aplicarles el Ayuntamiento. Convocada por todos los sindicatos de la junta de personal – ELA, LAB, Esan, CC OO y ErNE –, la marcha arrancó a las doce del mediodía de la plaza Moyua y después de atravesar la Gran Vía terminó al pie de la escalinata del Consistorio, donde se instalaron unas vallas protectoras. Allí leyeron un manifiesto y realizaron pitadas contra los políticos. «Blindan el Ayuntamiento como si fuéramos delincuentes», se quejaba uno de los convocantes con el megáfono.
«La plantilla no está pidiendo un aumento de sueldo como el alcalde y los concejales dejan caer. Nos encantaría tener el suyo. Uno de los alcaldes mejor pagados del Estado declara que los funcionarios vivimos muy bien», apuntaba un portavoz de la junta de personal. A la manifestación estaban llamados también el resto de funcionarios municipales, ya que aseguran que el empeoramiento de las condiciones laborales «es un problema general». Entre gritos de «¡Amaia Arregui (concejala de Seguridad Ciudadana) e Iñaki Elexalde (director de la Policía Municipal), dimisión!» y haciendo sonar sirenas, la marcha avanzaba encabezada por pancartas ante la expectación de los ciudadanos.
Según denuncian, las mesas de negociación que se han celebrado hasta el momento son «meros trámites», ya que «no hay una voluntad real» de llegar a acuerdos y «los únicos beneficios que ofrecen son los que vienen impuestos por Madrid». Desde Recursos Humanos han propuesto una reducción del porcentaje de las vacaciones y días libres que puede coger cada agente, lo que «complica la conciliación familiar». «Llevamos años de imposiciones, como el calendario de 5 semanas, que iba a ser la solución y ha sido un fracaso. No estamos dispuestos a que los trabajadores tengan que pagar por los errores de una mala gestión».
«Menos patrullas»
«Hay menos patrullas en la calle que hace 10 años», dicen. Con 28 grados al sol, los manifestantes de una plantilla de 850 agentes, «aunque la estructura está diseñada para 1.200», la protesta se encontró en la estación de Abando con la de los jubilados. Unos y otros se aplaudieron mutuamente. «Vamos a iniciar conversaciones con los trabajadores de Bilbobus para realizar actos conjuntos porque nos menosprecian a todos», anuncian. A su paso, sus compañeros del turno uniformados cortaban el tráfico, como acostumbran a hacer con el resto de convocatorias laborales.
La manifestación supone el inicio de una campaña de movilizaciones, que seguirá el próximo jueves en el pleno. También se plantean realizar alguna acción en fechas señaladas, como el BBK Live o Aste Nagusia.