El sindicato mayoritario de la Ertzaintza, ErNE, respondió este martes al consejero de Seguridad y vicelehendakari, Josu Erkoreka, que se refería a la falta de efectivos de la Ertzaintza, motivada principalmente por las vacaciones -falta el 25% de la plantilla- y las jubilaciones. De 8.000 efectivos, «no están disponibles por jubilación 800 o 900», afirmó Erkoreka.
A través de un comunicado, la central sindical denunció la situación «caótica» que vive el cuerpo en lo que se refiere a la gestión de personal y los medios materiales: No disponemos de furgonetas antidisturbios para hacer frente a un problema de orden público generalizado y las que disponemos tienen veinte años, ni dispositivos con un número de ertzainas adecuado.
Además, ErNE señaló que las bolsas de voluntarios son ridículas y no existen prácticamente en muchos centros, por lo que se realiza de forma forzosa en muchos de ellos, ocasionando malestar y vulnerando las jornadas de descanso de los ertzainas. Asimismo, alertó de que sus condiciones laborales y salariales son discriminatorias comparadas con las del resto de funcionarios.
Por todo ello, ErNE reclamó al consejero su dimisión «si no es capaz de modernizar la Ertzaintza y acabar con su discriminación laboral».