ErNE ha reclamado este miércoles, en representación de los sindicatos que conforman la Unidad Sindical en la Ertzaintza (ErNE, ESAN y SIPE), la participación e implicación de los gobiernos y ayuntamientos en los casos en que un policía haya sido agredido.
El sindicato ha hecho esta propuesta en el Congreso de EuroCop (Confederación Europea de Sindicatos de Policía) que se celebra en Málaga, en el que se ha presentado un estudio de la Universidad Antonio de Nebrija, sobre las implicaciones económicas de las agresiones a agentes policiales, que estima que el coste de dicha violencia asciende a mas de 400 millones de euros que tienen que afrontar los diferentes gobiernos y ayuntamientos en el estado español. En dicho informe han colaborado los sindicatos que conforman la unidad sindical, ErNE, ESAN y SIPE.
En un comunicado, ErNE ha lamentado que "en muchos casos los fiscales no adoptan las medidas necesarias". "Además, es posible que sus intereses no siempre coincidan con el daño infligido al policía y la angustia interna causada por la impunidad percibida", ha agregado.
Por lo tanto, ha abogado por una política que exija la personación en los procedimientos, como acusación particular, de los servicios jurídicos del Gobierno Vasco o de los diferentes ayuntamientos en los casos en que los atestados o denuncias policiales hayan documentado una agresión contra un miembro de la Policía.
Según ha explicado, esta medida tiene como objetivo garantizar una respuesta jurídica "más sólida y alineada con los intereses de la justicia". "La participación directa de entidades gubernamentales contribuirá a una resolución más integral y justa de los casos de agresiones a agentes de la autoridad", ha añadido.
Los sindicatos que conforman la unidad sindical han reclamado activamente este compromiso al consejero de Seguridad del Gobierno Vasco, Josu Erkoreka, y a las autoridades municipales de Euskadi, y apuestan por fomentar el diálogo y la colaboración para abordar los retos a los que se enfrentamos los policías para promover un entorno laboral "más seguro".
"Creemos que trabajando juntos podemos contribuir a cambios positivos que beneficiarán no solo a la Euskal Polizia, sino también a la sociedad a la que servimos colectivamente", ha concluido.